Intervención de Frans Timmermans, vicepresidente primero de la Comisión Europea
La posibilidad de que Rusia corte el suministro de gas a Europa se cierne sobre nosotros todos los días, afirma el vicepresidente ejecutivo Timmermans. Nos comprometimos en REPowerEU a poner fin a nuestra dependencia lo antes posible y reducirla en dos tercios ya este año, a través de la diversificación, las energías renovables y la eficiencia energética.
Pero reconocimos que incluso con estos esfuerzos acelerados, no llegaríamos a cero en cuestión de meses.
Hemos analizado cuidadosamente, junto con ENTSO-G, lo que significaría una interrupción total del gas este año para nuestra seguridad de suministro. El mensaje es claro: si hay una interrupción total, enfrentaremos una brecha entre la oferta y la demanda de gas.
Estimamos que esta brecha sería de alrededor de 30 bcm (millardo de metros cúbicos es una unidad de medida para el gas natural) en un invierno promedio, 45 bcm en uno más frío e incluso mayor si el invierno es excepcionalmente frío. Y asumimos que el suministro de gasoductos y GNL fuera de Rusia se mantendrá alto durante el invierno.
Para abordar esa dependencia restante de Rusia, debemos reducir la demanda de gas. También debemos preservar nuestra capacidad de llenar el almacenamiento de gas para este próximo invierno y el siguiente.
Los Estados miembros ya han hecho progresos notables a pesar de la difícil situación del mercado del gas, y el nivel de llenado actual está muy cerca del 65 %. Pero si se cortan los suministros de Rusia, alcanzar nuestro objetivo del 80 % para noviembre será un gran desafío.
Y si nuestro objetivo de reducción de la demanda no es lo suficientemente ambicioso, corremos el riesgo de terminar este invierno con nada de almacenamiento y sería imposible de llenar a tiempo para la próxima temporada de calefacción.
Teniendo en cuenta todos estos factores, estamos proponiendo una reducción del consumo de gas del 15% desde principios de agosto hasta finales de marzo. Esto corresponde a 45 bcm de gas y reducirá significativamente los riesgos de seguridad del suministro.
Actuando juntos, de manera coordinada y proactiva, somos nosotros quienes decidimos nuestra política energética, no Putin. Y al tomar medidas tempranas, reducimos el impacto en las economías de la UE, protegiendo a nuestra gente y empresas.
Retrasar tiene un costo. Aumenta el impacto negativo sobre el PIB en al menos un tercio. En nuestro escenario principal, esto podría significar una diferencia entre una reducción del PIB de 0,6% y 1,5%.
Para estar preparados para este invierno, hemos presentado una propuesta legal con un enfoque de dos pasos. En la primera etapa, hacemos un llamado a los Estados miembros para que reduzcan la demanda de gas en un 15 % de manera voluntaria, en comparación con su propio consumo durante un promedio histórico de cinco años.
Si los Estados miembros no avanzan lo suficiente o la situación se deteriora, proponemos que la Comisión pueda declarar el estado de alerta de la UE en cualquier momento. Esto dará lugar a una obligación para los Estados miembros de cumplir el objetivo de reducción de gas del 15 %.
No les estamos diciendo a los Estados miembros qué medidas deben tomar, ya que son los más indicados para saber qué funciona para su sistema energético y su economía.
Pero para ayudarlos a implementar esta ambiciosa meta, también hemos delineado opciones para ahorros voluntarios de gas desde el cambio de combustible hasta contratos interrumpibles.
El objetivo de estas medidas es evitar la necesidad de una reducción forzosa de la industria. Sin embargo, si llega a ser necesario, hemos establecido una guía para los Estados miembros sobre cómo tomar estas decisiones difíciles.
En la UE, los hogares son clientes protegidos, y no debería haber riesgo de que a nadie le corten la calefacción, ya que el suministro de gas a los hogares está protegido.
Pero todo el mundo puede y debe ahorrar gasolina. Continuaremos promoviendo las ideas establecidas en el Plan de Ahorro de Energía de la UE y pediremos a todos los Estados miembros que lancen campañas de concienciación para fomentar el comportamiento de ahorro de gas.
También existe un potencial considerable para que el sector público reduzca la demanda, especialmente en calefacción y refrigeración.
Este paquete tiene un propósito muy claro y específico: reducir nuestra demanda de gas. Paralelamente, continúa un intenso trabajo por el lado de la oferta.
En la primera mitad del año, los suministros de GNL a la UE aumentaron en 21 bcm y las entregas por gasoductos en 14 bcm. En total, este año hemos recibido 35 bcm adicionales de gas no ruso. El objetivo del Plan REPowerEU era 60 bcm de suministros adicionales en 2022.
En esta línea se ha acordado con Azerbaiyán duplicar los volúmenes de gas a la UE para 2027. Y esperamos ver un aumento de hasta 4 bcm extra ya este año.
También tenemos acuerdos vigentes con EE. UU., Canadá, Noruega, Egipto e Israel, y se continúa trabajando con Qatar y Argelia.
Todos los flujos de trabajo establecidos en REPowerEU (diversificación, compras conjuntas de gas, aumento de las energías renovables y el hidrógeno, aumento de la eficiencia energética y abordar los altos precios) siguen siendo nuestras prioridades absolutas.
Este invierno será una prueba para el sistema energético de la UE y para nuestra Unión en su conjunto. Es una prueba que superaremos si actuamos con unidad, solidaridad y determinación.
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